A la hora de plantearnos mejorar nuestra alimentación, es importante que pensemos en la cantidad de comida que debemos ingerir para cuidar nuestra salud, pero también para reducir el esfuerzo digestivo, el derroche de alimentos y cuidar el medio ambiente. ¿En qué consiste la dieta ecointeligente?
Desde Dieta Coherente la doctora en Farmacia y nutricionista Amil López Viéitez, te propone aplicar este decálogo de hábitos ecointeligentes teniendo en cuenta criterios de sostenibilidad y ahorro energético:
1. Consume alimentos de temporada
Consumir alimentos en su mes o época natural ayuda a respetar su ciclo de producción y a ser más respetuosos con el medio ambiente.
2. Reduce el consumo de «alimentos de largo recorrido»
Una dieta ecointeligente, se basa en alimentos de recorrido corto, pues favorecen la actividad agrícola local, dinamizan la economía y permiten la conservación de la biodiversidad agrícola autóctona. Según estadísticas del INE 2011, en nuestro país se importaron más de 25 millones de toneladas de alimentos, lo que generó una emisión de más de 4 millones de toneladas de CO2.
3. Alimentos de producción ecológica
La agricultura ecológica utiliza técnicas respetuosas con el medio ambiente. No emplea productos químicos de síntesis (que en su fabricación y transporte producen grandes emisiones de gases de efecto invernadero), está menos mecanizada que el modelo intensivo y favorece la biodiversidad local. Si además incluyes más alimentos crudos en tu dieta ecointeligente, reducirás la factura eléctrica.
4.Aumenta el consumo de proteína vegetal
Se estima que la actividad ganadera mundial es responsable del 18% de las emisiones de gases de efecto invernadero, un porcentaje mayor que la generada por todo el transporte.
Expertos en nutrición y cambio climático coinciden en que una dieta con mayor aporte de proteínas de origen vegetal que de carne, es más saludable tanto para nuestra salud como para la del planeta, por eso te proponemos una plant based diet con un consumo moderado de proteínas de origen animal y más abundancia de proteínas de origen vegetal (legumbres, frutos secos, semillas, cereales integrales, etc.).
5. Electrodomésticos ecoeficientes
Compra electrodomésticos de etiquetado energético A. Aunque son un poco más caros, a la larga ahorrarás consumo eléctrico y estarás haciendo un uso ecoeficiente de los recursos. Es importante que supervises el mantenimiento de tus electrodomésticos para evitar despilfarrar energía.
6. Eficiencia energética en la cocina
Cocina menos veces y más cantidad. Es conveniente que te acostumbres a planificar lo que vas a cocinar, para aprovechar la energía, cuando pones al fuego la sartén, un cazo o enciendes el horno o el microondas.
7. No tires las sobras
Los hogares españoles tiran 1,5 millones de toneladas anuales de alimentos válidos para el consumo, lo que supone medio kilo por persona a la semana. Trata de no tirar los restos de comida a la basura. Cocina la cantidad justa que vayas a comer o más cantidad si tienes pensado congelarla en tuppers. Almacena las sobras en el frigorífico, para que se mantengan en buen estado.
8. Cocina de aprovechamiento
Lo que no vayas a consumir, puedes darle una segunda oportunidad en tu dieta ecointeligente, en forma de cremas, purés, croquetas, ropa vieja, revueltos, salteados, salpicones, ensaladilla, empanada, migas, macedonias, sorbetes, batidos y un largo etcétera.
9. Planifica dónde comprar y la lista de la compra
Intenta ir caminando a plazas, tiendas o supermercados cercanos. Estarás apoyando a los productores locales y consumirás alimentos frescos y de temporada. Al utilizar el coche aumentas las emisiones de gases efecto invernadero.
Piensa y planifica de antemano los menús, calcula los ingredientes necesarios y escribe en una lista lo imprescindible, para evitar comprar de más y generar residuos innecesarios. Sobre todo con los alimentos perecederos.
10. Separa y lleva los envases a reciclar
Cada día se tiran millones de envases de un solo uso. Recipientes que, en el proceso de fabricación, transporte, distribución y en el caso de que se reciclen, requieren de un gran consumo energético con grandes emisiones de CO2. En tu dieta ecointeligente es muy importante separar los residuos y acercarlos al contenedor oportuno para que puedan ser reciclados.