Todos sabemos la importancia que las redes sociales tienen en nuestra sociedad actual. Modas que se difunden a la velocidad del viento en el camino virtual, sumando adeptos de forma vertiginosa. Sobre todo, si son tendencias que han sido basadas en las recomendaciones que los conocidos influencers han dado en sus redes sociales. Estas tendencias también están afectando a la belleza de nuestra sonrisa. Como es el caso del blanqueamiento de nuestros dientes, que puede incluso llegar a convertirse en una obsesión: blancorexia. Un problema psicológico que lleva a la persona a someterse, de forma continua y fuera de todo control médico, a raros tratamientos para conseguir un blanco cada vez más blanco en sus dientes.
El tratamiento de blanqueamiento dental con carbón activo se ha expandido a nivel mundial. Especialmente mediante las redes sociales y su repercusión. En los vídeos y fotos se anima a utilizar el carbón activo como si de una pasta de dientes de color negro se tratase. Asegurando su eficacia y confiando en sus garantías. Pero, ¿realmente es un tratamiento fiable y saludable?
Carbón activo para blanquear los dientes, ¿funciona?
Lo que tenemos claro es que el carbón activo se utiliza para purificar agua, para absorber sustancias nocivas del organismo en caso de envenenamiento y tiene un uso médico importante en hospitales. Sin embargo, expertos en salud dental, como el reconocido odontólogo Iván Malagón, aseguran que no es un método recomendable para aclarar la dentadura. A pesar de que en las publicaciones virales se hable de equilibrio del pH de la boca y eliminación de caries.
Malagón afirma que esta fórmula de blanqueamiento no ha sido validada ni desaprobada por la Asociación Dental Americana (ADA). Es decir, no se ha llevado a cabo ninguna prueba al respecto. Por ello, los expertos solicitan no seguir utilizándolo hasta saber cómo afecta internamente a los dientes. Tanto a corto como a largo plazo. Miembros de la ADA han mencionado que, al no conocer el poder de absorción de este material, se podría estar deteriorando el esmalte, el elemento más duro del organismo que garantiza la protección de los dientes y cuya pérdida es irreversible.
Según el Dr. Iván Malagón, “Para un blanqueamiento dental es fundamental acudir a una clínica odontológica especializada en estética dental para que se realice un estudio personalizado del estado de los dientes y de las causas que han podido modificar su color original. De acuerdo con nuestras características físicas, se selecciona un tipo de tratamiento que puede incluir un blanqueamiento o el recurso a carillas, si además de blanquear queremos disimular otros problemas estéticos causados por anomalías de la coloración del diente provocadas por algunos medicamentos, como las tetraciclinas”.
Consejos para mantener los dientes blancos
1. Rigurosidad en la higiene, después de cada comida y haciendo uso de la seda dental.
2. Evitar el tabaco, “nefasto para nuestra boca y el resto de nuestro organismo”.
3. Reducir el consumo de:
Café, té, vino tinto. Otras bebidas con un gran contenido en taninos y cromógenos, con un alto poder de tinción.
Refrescos y bebidas carbonatadas, azucaradas y energéticas.
Frutas y verduras de color intenso, cuyo pigmento se adhiere al esmalte.
Salsas como el Ketchup, la de soja y el vinagre balsámico.
Pero la mayoría de estos alimentos y bebidas tienen que estar presentes en nuestra dieta. Así que lo que es imprescindible es una higiene completa y rigurosa.
“Debemos destacar que el color de los dientes no es blanco. Su tono viene determinado por la dentina. Esa parte del diente, que junto con la genética, son las encargadas de dicho color amarillento y natural”, concluye.