3, 2, 1…. ¡Vacaciones! Por fin ha llegado el momento de descansar, de relajarse y de dedicar tiempo a hacer ejercicio, viajar y disfrutar de la familia. Nuestro cuerpo y nuestra mente necesitan un tiempo de descanso para recuperar el bienestar físico y emocional. Liberarnos de nuestras preocupaciones y del estrés acumulado durante todo el año. Pero cada vez nos cuesta más desconectar del estrés cotidiano, o incluso el simple hecho de estar de vacaciones, aunque suene paradójico, nos puede llegar a producir estrés. ¿Solución? Empezar a practicar mindfulness en vacaciones.
Ahora que empiezan tus vacaciones es el momento de romper con los malos hábitos y establecer otros que sean beneficiosos para tu cuerpo y tu mente. ¿Qué tal si comienzas a practicar mindfulness? Un estudio reciente de la Universidad de Harvard ha demostrado que el “efecto vacaciones” reduce el estrés y mejora el sistema autoinmune a corto plazo y que el “efecto vacaciones + meditación” hace que estos beneficios perduren durante más tiempo. Tal y como explica Benjamin Blasco, fundador de la app de meditación mindfulness Petit BamBou, “tan solo 10 minutos de meditación al día son suficientes para empezar a notar los primeros beneficios”.
Mindfulness en vacaciones: las 5 claves
1. Disfruta más de tus vacaciones
¡Qué mejor momento que el que estás viviendo ahora mismo! No importa si estás en una playa del Caribe, en la montaña o en casa, la meditación mindfulness te puede ayudar a disfrutar de cada minuto, a desconectar de todo aquello que no está pasando ahora mismo. Degusta, siente, experimenta, huele… presta atención al momento presente con los cinco sentidos.
2. Mejora el sueño
El 25-35% de la población adulta sufre insomnio transitorio debido al estrés y las preocupaciones cotidianas. Dormir más y mejor suele ser uno de los objetivos que nos marcamos para las vacaciones. Un truco que te ayudará, según Benjamin Blasco, “durante 10 minutos antes de dormir céntrate en tu respiración, sin pensar en nada más que en ella. Conseguirás un estado de tranquilidad y paz interior que te permitirá conciliar el suelo mejor y más rápidamente”.
3. Mejora tu estado de ánimo
Y al mismo tiempo mejorarás tu estado físico. El estrés, la ansiedad, la tensión, la angustia, el dolor y demás emociones y sentimientos tienen un reflejo en nuestro cuerpo e incluso son los causantes de algunas enfermedades que podemos llegar a padecer: coronarias, cutáneas, problemas digestivos, depresión. Ahora es el momento de ‘cargar las pilas’ y aprender nuevas técnicas para reconocer estas emociones y ‘dejarlas ir’ para mejorar tu calidad de vida.
4. Desarrolla relaciones armoniosas
Puede que tu sueño sea pasar tus vacaciones en una isla desierta o incomunicado en la montaña… pero lo más probable es que pases este periodo estival con tu familia o amigos. Somos seres sociales, pero no siempre nuestras relaciones personales (amistad, pareja, familia, trabajo, etc.) son como deseamos. No puedes cambiar a la gente que te rodea, pero sí tu actitud hacia ellos. Intenta que se produzca ese cambio hacia tu familia y amigos ahora y benefíciate de ello cuando vuelvas al trabajo.
5. ¿Puedes ser más FELIZ? Mindfulness en vacaciones
Como decía Aristóteles: “La felicidad depende de nosotros mismos”. Nuestra actitud hacia nosotros mismos y lo que nos rodea es lo que va a determinar que seamos más o menos felices. ¡Comprueba tú mismo los beneficios de una actitud mindfulness! Disfruta el momento presente sin distracciones, duerme bien, relativiza todo aquello que no está en tus manos cambiar, acepta a la gente que te rodea tal y como es.