dormir en verano

El verano viene acompañado de playa, sol y noches de terraza. Pero también de temperaturas elevadas, cambios de armario y, cómo no, problemas para conciliar el sueño y dormir en verano.

“El excesivo calor y las variaciones en la rutina hacen que el verano sea una de las épocas del año en la que los españoles tienen más problemas para conseguir dormir”, explican los expertos de Somnisa, el primer tratamiento online capaz de solucionar el insomnio de forma definitiva y permanente.

Consejos para dormir en verano

1. Escoge bien tu ropa de cama

Si tus sábanas están elaboradas con materiales sintéticos, como el poliéster, quizás deberías ir pensando en un cambio. Aunque muchas personas eligen este tipo de tejido porque se arruga menos, es importante saber que no absorbe la humedad del cuerpo, por lo que no transpira y aumenta la sensación de calor. La mejor alternativa a los sintéticos son los tejidos naturales como la seda y el algodón.

2. Cenar en una terraza

Sobre todo si tiene buenas vistas, es un must y, probablemente, una de las mejores alternativas que nos ofrece el verano. Sin embargo, es vital ser conscientes de la elección de platos. Las digestiones pesadas, unidas al calor, son uno de los principales enemigos del sueño. es recomendable optar por cenas ligeras. Además, es conveniente evitar la ingesta de alcohol ya que, aunque sí que ayuda a conciliar antes el sueño, este será menos profundo y sufrirá más interrupciones.

3. Deja el móvil

También es normal que, nada más acostarte, cojas tu smpartphone de la mesilla y chatees por Whatsapp con tus amigos o hagas un repaso a sus redes sociales para estar al tanto de sus vacaciones. Esto, no obstante, también puede hacer que sigas dando vueltas en la cama. Una de las pautas fundamentales a seguir para lograr una correcta higiene del sueño es no hacer en la cama ninguna otra actividad que no sea dormir o mantener relaciones.

4. ¿Duchas de agua fría? Mitos para dormir en verano

Seguro que, en alguna ocasión, un familiar o compañero de trabajo te ha asegurado lo mucho que le funciona darse una ducha fría cuando no logra conciliar el sueño a causa del calor. En primer lugar, se produce en nuestro cuerpo un proceso de quema de calorías para afrontar ese cambio brusco de temperatura, lo que da lugar a una sensación de calor, que es lo contrario a lo que se pretendía. En segundo, el agua fría no hará sino reactivar nuestro cuerpo, haciendo más complicada la labor de dormir.

5. Mantener una buena higiene del sueño

Eliminar de la rutina aquellos hábitos que impiden dormir de forma placentera. Tratamientos como Somnisa, que es online, libre de medicamentos y que cuenta con la atención de especialistas, son ideales para conseguirlo”, concluye la doctora experta en Psiquiatría y Medicina del Sueño.

 

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